➡ English translation below
Les comparto la experiencia de Sofi y Belle viajando desde USA hacia Argentina:
A Belle la adopté de la calle cuando tenia 2/3 meses aprox y desde el día 1 nos volvimos inseparables. Yo estaba estudiando en Estados Unidos con planes de quedarme allá después. Al final hubo un cambio de planes y cuando le planteé a mis viejos volver a casa, era con el combo o nada.
Organizamos todo en una semana. Viajamos con American Airlines desde Miami: el costo de que Belle viaje en bodega (por su peso no me dejaban que vaya arriba) salió $250/300 dólares estadounidenses. Fuimos en auto hasta ahí (17 horas para hacerlo mas fácil y ameno). Compré la transportadora de mayor tamaño que me permitía la aerolínea, me salió $200 dólares estadounidenses aprox.
Unos días antes de viaje fuimos a la veterinaria a que le haga el control y los papeles necesarios para entrar a Argentina. Es básicamente un chequeo de salud general, con vacunas y desparasitación al día. Por suerte yo ya la había castrado de cachorra y para venir a Argentina no pedían microchip. Los documentos hay que mandarlos a apostillar medio express porque tienen pocos días de validez, me llegaron justo antes de encarar el viaje en auto.
A la hora de buscar pasaje buscamos que no saliera temprano de Estados Unidos ni llegue temprano a Argentina ya que estaba viajando en pleno verano/invierno y hay rango de temperatura por cualquier imprevisto o demora del vuelo.
Encaramos el viaje a Miami con suficiente tiempo para ir a una plaza a jugar antes de ir al aeropuerto, comer, pasear, bañarme o cualquier imprevisto que surgiera. Una vez que despachamos todas las valijas teniamos tiempo para ir a una placita dentro del aeropuerto hasta el limite horario antes que la tuviese que meter en la transportadora.
En la transportadora viajo con chapitas en el collar, papeles, su camita, mantita con olor a nosotras y Kong congelado con mantequilla de mani (su preferido).
Además le congelé el agua para que durara y también pegué afuera de la transportadora su correa y comida por cualquier cosa.
Cuando llegamos a Ezeiza salieron todas mis valijas antes que ella. Mi mayor miedo era que me la retuviera Senasa al llegar así que mis papás nos fueron a buscar al aeropuerto y ayudaron a que la sacaran rápido por la cinta. Nos revisaron todos los papeles, que estuviese todo ok y nos fuimos. En el estacionamiento la saque de la transportadora, le di de comer y la deje que haga sus necesidades antes de encarar el ultimo tramo en auto hasta casa.
Creo que ninguna durmió nada en el viaje porque llegamos agotadas pero lo importante es que llegamos bien las dos y que estamos juntas ❤️
Gracias Sofi y Belle!
Instagram: @callejeraimportada
I share with you the experience of Sofi and Belle traveling from the USA to Argentina:
I adopted Belle from the street when she was about 2/3 months old and from day 1 we became inseparable. I was studying in the United States with plans to stay there. In the end there was a change of plans and when I spoke with my parents about going back home, it was with Belle or nothing.
We organize everything in one week. We flew with American Airlines from Miami: the cost for Belle to travel in the hold (because of her weight they wouldn’t let her go in the cabin) was $ 250/300 USD dollars. We drove there (17 hours to make it easier and more enjoyable). I bought the largest kennel that the airline allowed me, it cost me $ 200 USD dollars approx.
A few days before the trip we went to the vet to do the control and the necessary papers to enter Argentina. It is basically a general health check, with vaccinations and deworming up to date. Luckily I had already castrated her as a puppy and to come to Argentina they didn’t ask for the microchip. The documents have to be sent to be express apostilled because they are valid for a few days, they arrived just before I started the trip by car.
When we were looking for a ticket, we try not to leave the United States early or arrive early in Argentina since I was traveling in the middle of summer/winter and there is a temperature range due to any unforeseen or flight delay.
We face the trip to Miami with enough time to go to a park to play before going to the airport, eating, walking, bathing or whatever unforeseen event arises. Once we had dispatched all the bags we had time to go to a small dog relief area inside the airport until the time limit before I had to put her inside the kennel.
In the kennel she traveled with her ID badge on her collar, papers, her bed, a blanket with the smell of us and frozen Kong with peanut butter (her favorite).
I also frozen the water for it to last longer and also sticked her collar, leash and food on the outside of the cage in case it was needed.
When we got to Argentina’s Airport (Ezeiza) all my suitcases came out before her. My biggest fear was that Senasa would hold it for me when I arrived, so my parents went to look for us at the airport and helped getting her out as quickly as they could. Senasa reviewed all the papers, everything was ok, so we left. In the parking lot, I took her off the kennel, fed her, and let her pee and do her things, before the last ride heading home.
I think neither of us slept at all during the whole flight because we arrived exhausted but the important thing is that we both arrived well and that we are together ❤️
Thanks Sofi and Belle!
Instagram: @callejeraimportada
No Comments